Sandra hablaba por teléfono con Javier, su novio
-Me quieres? preguntaba Sandra..
(...)
-que tanto? cuestionaba Sandra nuevamente
(...)
-ayyy que lindo!! exclamaba Sandra emocionada de escuchar lo que le decían...
(...)
-Yo también te quiero mucho!!
(...)
-El sábado?
(...)
-A a casa de quien?
(.....)
Sandra sonreía coqueta mientras hablaba con su nuevo amor, Javier era un chico
moreno, altísimo, fuerte, de buen cuerpo; un atleta por naturaleza.
Sandra estaba recostada en un cómodo sofá para 3, su cabeza sobre un cojín
rosado y sus manos aferraban la bocina del teléfono, mientas que su pie derecho
colgaba lánguidamente sobre el respaldo del largo sofá, pero en cambio, su pie
izquierdo estaba en el suelo y se movía rítmicamente arriba, abajo, arriba,
abajo.
En el piso, junto al sillón, totalmente desnuda, estaba la pequeña esclava de
"ellas-3", la perra estaba arrodillada, con las rodillas muy
separadas y con los ojos fuertemente cerrados mientras el empeine del pie
descalzo de Sandra se resbalaba arriba y abajo sobre el sexo completamente
depilado de la pequeña chica morena.
El pie de Sandra se movía siguiendo el ritmo de la música, que sonaba en el
equipo de sonido, a veces, Sandra daba una pequeña patada con su pie
directamente en el sexo expuesto de su sumisa amiga, el golpe, simplemente seguía
el ritmo de la música, pero a veces el golpe era un tanto más fuerte de la
cuenta, lo cual causaba un espasmo o un salto en el cuerpo desnudo de su
pequeña esclava sexual.
La música que sonaba era de mezcla electrónica y esta pieza le gustaba mucho a
Sandra, por lo que su pie fue tomando mayor fuerza y mayor ritmo, todo ello sin
que ella realmente se diera cuenta, ya que, estaba muy ocupada haciendo
amarrucos con Javier por teléfono mientras miraba soñadoramente el techo del
elegante apartamento.
Pero la pequeña chica desnuda, con el empeine del pie de Sandra frotándose con
gran fuerza contra su erecto centro de placer el cual sobresalía de entre los
labios de su sexo completamente depilado, se sacudía en breves espasmos de
placer.
El ritmo del pie comenzaba a hacerla brincar al ritmo, ya que el fino pie de
Sandra así se lo marcaba, poco a poco la dilatada cuevita de eva comenzó a
lubricar mas y mas, por lo que eva ya sentía el calor propio de un gran orgasmo
que amenazaba escaparse de su control de un momento a otro.
-Entonces el Sábado nos vamos a ver, verdad Javi?
(...)
el empine y el tobillo de Sandra chapoteaban en la humedad del sexo de la
pequeña chica calenturienta.
Poco a poco, los ahogados grititos excitados, la respiración entrecortada, los
suspiros y la vibración del cuerpo de eva eran cada vez mayores, de pronto, eva
puso los ojos en blanco y un agudo "MMNNnnngggg" se hizo oír por todo
el salón.
Sandra, sorprendida por el ruido inesperado, se levanto del sofá y descubrió a
eva viajando ciegamente en el vuelo de un gran orgasmo, abrazada al tobillo de
ella, restregando así su sexo contra el fino pie de Sandra.
Sandra, contrariada por el ruido y con una amargada punzada de celos por el
delicioso orgasmo que veía estallar delante suyo, tapo la bocina del teléfono
con una mano y con la otra le propino tremenda bofetada a la extasiada esclava
morena.
-Cállate pendeja, que no vez que te va a oír Javier!!!???
Sandra bajo el pie derecho del respaldo del sofá y se sentó en el sofá, por un
par de segundos contempló a aquella ninfa gozando del placer que a ella le
costaba tanto trabajo alcanzar.
Sandra sintió una ira vengadora, hervir por sus venas.
Entonces, con sus pies, uno apoyándose pesadamente en el bajo vientre de eva y otro directamente en sus pechos, obligo a la pequeña gozadora a recostarse boca arriba en la alfombra.
Levantó el pie derecho y lo apoyo directamente
en el cuello de su esclava obligándola a abrir los ojos y mirarla; mientras que
con una sonrisa torcida comenzó a formarse en su boca, Sandra comenzó a
enterrar el dedo pulgar de su pie izquierdo directamente en la vulva
semi-abierta de su pequeña perra, quien silenciosa, se dejaba hacer.
la voz de Sandra en el teléfono se hizo suave y seductora
-sabes Javi?..
-Tengo muchas ganas de verte antes del sábado...
El zumbido de placer que emanaba del cuerpo de eva, cambió a uno más silencioso
y eva lentamente separó sus rodillas, permitiendo así, a Sandra enterrar con
saña la punta de su pie descalzo en su cuevita depilada.
Poco a poco, usando la lubricación natural de eva y la fuerza de su pie, Sandra
enterró la punta de sus dedos en la cuevita empapada, luego, sin dejar de
hablar con Javier, comenzó a meter y sacar su pie de la cuevita depilada.
El pie comenzó a ganar fuerza y velocidad, cada estocada era más fuerte y
profunda, por lo que eva comenzó a emitir quejidos con cada embestida, por lo
que Sandra apretó su pie derecho, apretando así el cuello se su esclava.
Eva comprendió la orden y guardo silencio, al tiempo que el pie de su dueña
entraba y salía de su cuerpo con ritmo arrollador, entonces Sandra se despidió
cariñosamente de Javier y al momento de colgar el teléfono sonrío con saña y
dijo:
-ya puedes venirte de nuevo perra
Sandra observo fascinada como su ex-amiga, eva, se retorcía en los estertores
de un segundo orgasmo a escasos 3 minutos del anterior.
-que rico te vienes perra, me gustaría ser multi orgásmica como tú, pero claro
que yo nunca me rebajaría a hacer lo que tú haces, para obtener placer.
Lentamente Sandra extrajo su fino pie del cuerpo de eva y se limpio la humedad,
haciéndolo resbalar sobre el cuerpo desnudo de su pequeña esclava.
Sonriéndole se inclino hacia adelante y mirando a la pequeña mujer desnuda
acostada en el piso frente a ella, susurró:
-Quiero que te masturbes una vez más para mi sola, perrita, antes de que
lleguen las demás!!
Saludos
Eva Fernanda Saláis Montiel
dic 2006
2 comentarios:
Asi me gustari atenerte, a mis pies sirviendome y tu obedeciendo. De miss Sofia
Perfecta escena llena de envolvente sensualidad y belleza. Muy gratas todas tus entradas de blog, inspiradoras e instructivas. Se agradece poder hallar perlas como las que escribes.
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