Eva, La Esclava, en la tienda de ropa

.

....Que dia!  (Me levanto de la cama y voy al baño), al regresar me encuentro con tu cuerpo desnudo en mi cama, Aún no me hago a la idea, pero desde hace apenas 4 días te convencí y ahora te tengo toda para mí.

nos conocimos hace apenas 6 meses y ahora al fin te  mudarás a mi departamento.

Tengo 3 años de divorciada, ahora tengo 36 años, mi hijo está en Disneyworld con su papá y yo aqui aceptando  al 100% mi lesbianismo...   DIOOooS!! ..Me empiezo a sentir toda alocada, nada más de verte.

-Despierta ya dormilona!!, le digo...

Es increíble que en ese pequeño cuerpo de niña, viva  una candente y sensual mujer de casi 25 años y para cualquiera que te mire pareces sólo tener 18 o 19 años.

Te veo abrir un ojo y mirarme, luego te estiras, Te retuerces en la cama, pareces una gatita amodorrada,

la veo mientras se da la vuelta y me da la espalda.  Durante breves segundos mis ojos beben ávidamente de  su figura perfecta, su piel color marfil.

-OYE, NO!, que hoy tengo planes para ti. le reclamo. 

-HHUUMMGGG...  me contesta. 

-Anda, que ya es casi medio día, y yo prometí regalarte  la minifalda de piel que siempre has querido, con la   condición de que la modeles para mi..., recuerdas?

Como por arte de magia se levanta de la cama, me mira con una sonrisa de niña traviesa y luego sus labios llenos, sexys y naturalmente rosados de fruncen en una trompita de puchero, sus pequeños pies basculan a pocos centímetros del suelo, lo que refuerza su imagen de niña.

-Yo ya me bañé, y me arreglé, quiero que te arregles como quedamos ayer, ya sabes, nada de ropa interior que nos estorbe, hoy no quiero que te pongas maquillaje,  sólo te pondrás unos jeans, tenis y esa blusa; yo te  haré 2 colitas en el cabello. Quiero que te veas MUY  joven, ok?

Me siento en mi cama mientras Evita se viste a gran  velocidad, sus pocas pertenencias, aún estan en una gran caja de cartón junto a mi cama. Al verla vestirse, me hace pensar en un chico adolecente, se mueve rápida y ágilmente, se pone los pantalones de mezclilla,  tennis, la blusa.... a ver, siéntate mientras yo te  peino y te pongo las donitas.

 Bajamos al estacionamiento subterráneo, se sienta a  mi lado y yo manejo unos minutos entre el pesado transito citadino, pero unos minutos más tarde entramos a la  elegante zona de tiendas y boutiques. la calma de las  pequeñas calles arboladas nos da un respiro.

Te veo sonreír leve y tímidamente mientras me estaciono frente  a la pequeña y exclusiva tienda de artículos de piel.

-te vas a portar bien, entendido? le recuerdo. Eva solo responde sonrojándose y asintiendo.

Al entrar a la tienda percibo el penetrante olor a  piel que llena el saturado ambiente de la boutique. Una alta y esbelta vendedora se nos acerca y pregunta si nos puede ayudar.

-A decir verdad, si, estamos buscando algo de piel para  ella. le comento a la vendedora señalando a Eva.

-Creo que tenemos varias cosas para ella, eres talla "Small", verdad?

-"petite" contestamos al limón Eva y yo.

Miro la tienda y me percato que solo estamos Eva, yo y la alta vendedora; y nadie más.

La vendedora recorre con mano experta los anaqueles de la pequeña y atestada tienda, mirando de cuando en cuando a Eva, quien se muestra, quieta y callada, mirando al piso, tal como acordamos.

La alta chica debe tener 17 o 18 años, es decir que Eva le  lleva al menos 8 años, en cambio yo casi le llevo 20 pero aun así, yo y la vendedora somos por lo menos unos 25 o 30cms mas altas que Evita.

-Creo que esto le servirá, comenta la vendedora mostrando una falda color vino, Yo tomo la falda de la mano de la  vendedora y guio a Eva del brazo hasta el pequeño vestidor.

Cierro la cortina mientras te quitas los jeans y te pruebas la falda, unos segundos después, nos damos cuenta que es  una talla demasiado grande.

-No, no me gusta Evita, yo quiero que te ajuste bien.

De inmediato procedes a quitarte la faldita, y yo, antes de que te dé tiempo de ponerte los jeans, abro la cortina y salgo del vestidor y le explico a la vendedora que es  demasiado grande, la chica, quien ya nos esperaba tras la  cortina con otras faldas en la mano, agranda los ojos mirándote.

Abro por completo la cortina y te veo enrojecer, al darte cuenta que estas desnuda de la cintura para abajo, frente  a una extraña, quien mira tú depilada cuevita.

yo a sabiendas, mantengo la cortina completamente abierta mientras tú te pones la nueva falda a toda prisa frente a nosotras dos,  tratando de ocultarte.

Ésta falda negra, parece de tu medida, poniendo de manifiesto que tu cuerpo ya no es de niña, las firmes y hermosas caderas que se enmarcan bajo la falda y enmarcan tu  estrecha cintura.

Te tomo de la muñeca, jalo de ti y te guio a los espejos de  frente a los vestidores, te vez hermosa, aunque rompe con la  imagen de niña que quiero para ti.

-También tenemos Pantalones y chalecos.... siguiere la  vendedora. si quiere le muestro algunas cosas que creo le vendrán bien.

-A ver, tráigalas. Contestó yo.

Al rato la alta jovencita regresa con las piezas, y tu inicias  el movimiento hacia el vestidor, yo te retengo del brazo y te  dijo en voz alta para que nos escuche la vendedora: "cámbiate aquí"

el tono de mi voz no acepta réplica y la mirada de la  vendedora devora ávida tu cuerpo pequeño y perfecto.

La vendedora trata de disimular mirando hacia el frente de la  tienda, yo le pregunto:  

-No la quieres ver?

 -Es, es, Es muy hermosa. Responde titubeante la vendedora.

-Tú sigue viendo, pues a Eva le gusta que la vean, verdad Eva?

-Si MISS  Sonia, es verdad. contesto yo en un suave susurro.  mirando siempre al piso.

La chica devora tu cuerpo desnudo de pie entre nosotras mientras yo reviso las prendas que ella ha traído.

Yo sé lo que te excita estar así desnuda frente a una extraña y la chica parece complacida con lo que está viendo. la vendedora y yo comentamos esta y aquella pieza, parece que la chica ha leído mi pensamiento y ambas demoramos unos minutos más la situación de  tenerte totalmente desnuda, mientras nosotras 2 permanecemos vestidas.

al fin, luego de varios minutos de estar de pie, totalmente desnuda,  frente a nosotras 2, me decido por un chaleco color miel y te lo entrego; es un chaleco corto tipo torera, sin botones, el cual tú te  pones agradecida para poder ocultar tus senos desnudos.

Luego viene el ajustado pantalón, entre las 2 te ayudamos a subirlo, HHUUMM, los ojos de la vendedora son más elocuentes que mis palabras, tus piernas y tus caderas se marcan a la perfección, entonces yo recorro con mis manos la curva de las paradas caderas, demorándome en la entrepierna para revisar  como "ajusta".

La vendedora, envalentonada por tu silenciosa y pasiva actitud  y por un guiño de mi parte, se acerca y también sus manos  recorren el frente del pantalón, al fin su mano se detiene sobre tu sexo y me dice: "aquí también ajusta muy bien".

Yo para comprobar la veracidad de sus palabras extiendo mi  mano y ahora las 2 sentimos como ajusta por delante y por detrás.

Nuestras manos se demoran sobre ti y tu cierras los ojos,  abandonándote al embrujo de nuestras manos, el chaleco se  abre y mi mano sube y pellizca uno de tus erectos pezones  yo remuevo la punta entre mis dedos, y siento como se  endurece aun más bajo mi caricia.

La vendedora, asombrada de mi audacia, me imita y toma tu  otro seno, sopesándolo y pellizcándolo suavemente. El chaleco cae al suelo.

los minutos se arremolinan a tu alrededor....

Tu gimes y te retuerces, un par de minutos más tarde veo tu  imagen reflejada en el espejo de cuerpo entero frente al cual hemos estado explorando tu cuerpo. de pronto veo una "clara"  mancha de humedad, en la entrepierna del ajustado pantalón.

-QUITATE ese pantalón niña!!!, que no vez que aun no lo hemos pagado?

-es que, es que..., tratas de explicar...

una fuerte y sonora cachetada atraviesa tu cara y mi mano se  levanta de nuevo mientras tu te sacas a toda prisa el pantalón  mojado.

-QUE TE DIJE???!!, pero no, ahí vas y me avergüenzas frente  a la señorita, mira lo que hiciste, ahora ya manchaste el pantalón!!!

Tu mirada se clava en mis pies mientras te regaño airadamente, la vendedora, entre consternada y asombrada nos mira, yo  totalmente vestida y tu completamente desnuda.

-Pídele perdón a la señorita AHORA MISMO!!!

 

En silencio, caminas los 2 pasos que te separan de ella, tu mirada, siempre clavada en el suelo, tu voz es apenas un murmullo, tu cuerpo brilla y tus pezones apuntan hacia ella.

-Por favor señorita, le pido disculpas, hare TODO lo que Usted desee, para compensarla por haber manchado la ropa que  manché mientras me probaba...

Muda asombro la chica me mira y yo le animo con un gesto de la  cabeza. entonces ella estira las manos...

 

una mano va hacia tu sexo brillante y la otra acaricia tus caderas yo sonrío y me recargo en el espejo mientras veo a la alta vendedora tomar entre sus dedos tus pezones y jalar de ellos hacia arriba,  forzándote a ponerte de puntillas entonces su cara se agacha y besa  tu frente, tus ojos, sientes el gesto imperativo de su cabeza y  al fin la entiendes y levantas tu cara y entonces ella sin soltar tus senos te besa de lleno en la boca.

un segundo después eres un sándwich humano entre  nosotras 2, yo de pie tras de ti, jalo de tus cabellos para  separar tu boca de la de ávida boca de la vendedora y ahora con tu cabello en mi mano, giro tu cara para besarte yo también.

Tu cuerpo desnudo empieza a temblar y yo se que ya estas  al borde de tu 1er orgasmo del día, y sé que hoy te veré estallar muchas, muchas veces más.

la vendedora suelta tu pezón derecho y su mano se refugia en tu  depilada cuevita, yo aprovecho la situación y atrapo ese pezón entre mis dedos, ambas nos leemos el pensamiento, no hemos bajado  nuestras, forzándote a mantener la incomoda posición de puntillas.

mi boca se acerca a tu oído y apartando el cabello te dijo

-no te atrevas a estallar sin pedirme permiso perra, entiendes?

-Si, Si mi ama, lo entiendo. respondes tu entre gemidos de placer.  

 

Poco a poco los últimos rayos de luz iluminan tu cuerpo desnudo aprisionado entre la joven vendedora y el espejo de cuerpo completo que se llena de vaho y se empaña del calor de tus caderas y tu espalda desnuda.

Estas con los ojos cerrados y con las piernas abiertas, resoplando mientras la vendedora explora tu cuerpo, penetrando aquí, pellizcando allá, ahora ella sabe que eres y que no tienes mi permiso de llegar al orgasmo e intenta hacerte estallar para ver cual será el castigo.

Es natural en ella, la veo sonreír cada vez que arranca un gemido de tu pequeño cuerpo.

Dentro de poco te castigaremos entre las dos, lo sé.

Creo que la invitare a pasar el fin de semana con nosotras, quiero ver hasta donde es capaz de llevarte y cuanto aguantaras.....